21 septiembre 2004

Septiembre... así es la vida

[importado de mi antiguo blog en PsychoCorp.net]
Son muchas las teorías (científicas, esotéricas o puramente sci-fi) que dicen que el tiempo es circular. No sé si es cierto (muchas cosas funcionan en ciclos, pero a nadie le gusta que duden de su libre albedrío), pero el caso es que si poco antes de las vacaciones reflexionaba en voz alta sobre la muerte y el fin de la vida, poco después de acabar estas, un debate semejante se ha abierto en las calles a raíz del estreno de "Mar Adentro" (una película de magnífica factura por otra parte, cuyo único defecto es la absoluta falta de sorpresas).
El jueves es mi cumpleaños. La palabra es bonita, aunque a veces me da por pensar que el concepto es erróneo. En ese sentido prefiero la palabra inglesa "birthday" (día del nacimiento), que si bien es fonéticamente bastante más desagradable, resulta más alegre: no veo el motivo de celebrar el "cumplir años" (en esta sociedad obsesionada con la belleza y la juventud, a nadie le apetece envejecer), pero me parece de lo más hermoso celebrar entre amigos el hecho mismo de estar aquí, de haber nacido.
El resto del asunto es parafernalia: las bebidas, los regalos... parafernalia muy de agradecer, por otra parte (a nadie le amarga un dulce ;-), pero que no es sino parte del ritual occidental de mostrar cariño (¡pero mira que somos consumistas!)
Además, son fechas de eso, de consumir (la chispa de la vida, como diría una de las mayores trademarks del planeta), con fascículos absurdos para coleccionar tonterías, grandes lanzamientos que no interesan a nadie y ocasionales joyitas frikis en las que dejarnos, nosotros también, los cuartos.
A falta de alguien que me los regale (no es ninguna indirecta :-D, sólo pienso en voz alta!) mi lista incluye importar los DVDs de Millennium (la serie de Chris Carter que dudo llegue a ver editada en España), el DVD de "Performance" (la gira de Pet Shop Boys del 91), y bueno, algunas otras perlas que casi prefiero no recordar. En realidad me hace más falta un armario para la ropa y un reproductor de DVD (que el que tengo salta más que un sapo oligofrénico). Total, con las compras de este verano tengo para estar viendo películas hasta navidades (sin parar, diría yo). Ya vendrá consumismo nuevo entonces (y después, en las rebajas!)
Menos mal que aún nos quedan vías de desintoxicación. Yo me pienso hinchar a hacer teatro estos meses, escribiendo, ensayando, dirigiendo y leyendo. (Ah, si alguien de por aquí se quiere apuntar a los talleres, que se informe en www.teatrofilos.com ;-)
Ahora os tengo que dejar... ¡que estoy en el trabajo!
¡Así es la vida!